Foto de portada: d’Althea
Hola a tod@s
Siempre es una alegría recibir una invitación de boda y poder asistir a un día tan especial para vuestros amigos o familiares. Aunque antiguamente este tipo de eventos tenía muchos restricciones en cuanto a protocoles de vestimenta y de comportamiento a día de hoy la cosa ha cambiado bastante pero aún así los invitados deben intentar evitar ciertos errores.
Hablando con el fotógrafo Mario Setién que trabaja por la zona del norte de España (sobre todo en Cantabria), estuve repasando algunos de los errores más comunes y nos ha parecido muy divertido compartirlos públicamente con vosotros. A veces estos errores no tienen mucho importancia pero otras veces si que lo tienen cuando se tratan de detalles de gran importancia para la pareja.
Así que allá vamos con algunos de los grandes y pequeños errores que hemos visto en las bodas de hoy y que creamos se pueden evitar.
No ser puntual
La puntualidad como invitada de boda siempre es apreciado y por lo tanto es muy importante llegar un poco antes de la hora, sobre todo si no conoces el sitio donde se va a realizar la boda. Lo normal es que cuando vas con más prisas, peor te sale todo, te manchas, te topas con un atasco y luego no encuentras aparcamiento. Al final llegas tarde y ya sabes que la novia es la única que puede llegar tarde.
Si por lo que sea llegas tarde de todas formas, procura no entrar a la vez que la novia o inmediatamente antes/después, es mejor espera unos minutos más y entrar sin que nadie te esté mirando.
No responder a la invitación cuando llega
A veces los novios entregan las invitaciones de boda personalmente pero otras veces deciden enviarlos por correo postal para que sea una sorpresa y una alegría para los invitados. Una vez que hayas decidido si puedes asistir o no es muy importante confirmarlo con los novios. No porque la invitación os haya llegado, los novios ya van a asumir que vais. Ellos necesitan una confirmación (y cuanto antes, mejor) para reservar el catering y distribuir las mesas entre otras cosas.
No seguir el dresscode
No es lo mismo una boda de mañana que una de tarde. Por la tarde puedes lucir un look más atrevido, un maquillaje más potente y sacar los brillos. No obstante, ten cuidado con los escotes, sobre todo si la boda es religiosa. Es mejor pecar de sencillez e ir más elegante.
Ocupar los asientos delanteros en la ceremonia
Los asientos delanteros están estrictamente reservados para la familia cercana de los novios (padres, hermanos y abuelos). Sin embargo, si vas a leer algún escrito durante la ceremonia sí que está permitido que te sientes delante, pero si no es así, lo mejor es sentarse a partir de la tercera o cuarta fila.
Subir una foto de la novia antes de la ceremonia
El mejor secreto de la novia es su vestido, eso lo sabemos todo. Si vas a acompañar a la novia para ayudar a vestirla tendrás el privilegio de verlo antes incluso del novio. Si os vais hacer fotos es muy importante que no compartas nada en tus redes sociales hasta al menso después de la ceremonia. Tus followers no tienen porqué ver a la novia antes que el novio. Sácale todas las fotos que quieras pero respeta los tiempos y súbelas después de la ceremonia. No es el primer novio que ve el traje de la novia un story de Instagram antes de la ceremonia…
Ir al baño durante la ceremonia
Antes de los eventos importantes hay que ir al servicio para no interrumpir la boda. Es cierto que no van a pararla porque un invitado tenga que salir al baño, pero no es de buen gusto ver que una persona camina por el pasillo. Recuerda que los novios no saben el motivo por el que te vas y puede que piensen que te estás aburriendo o no te interesa la ceremonia.
Vestir de blanco
¡NO! Nunca, jamás vistas de blanco (o de casi blanco) en una boda por norma general. Este color se reserva única y exclusivamente para la novia. Esto es algo que ya os comenté hace algunos años en este post tan divertido sobre lo que no puedes llevar puesto como invitada de boda. Sin embargo, si en la invitación se incluye que uno de los colores del dresscode es el blanco, sí que lo puedes llevar, por supuesto.
No poner el móvil en silencio durante la ceremonia
La ceremonia es uno de los momentos más emotivos para la pareja, ya sea una ceremonia religiosa o una ceremonia civil. Para ellos es muy importante que todas esas personas les acompañan durante ese momento. Apagar el móvil ya de por si es un gesto de respeto en nuestro día a día cuando estamos trabajando o en una reunion importante, así que imaginaros durante una ceremonia.
¿Te gustaría que a uno de tus invitados le sonara el móvil mientras estás en el “Sí, quiero»? Seguro que no. Pues es algo que se ve casi siempre en las ceremonias. No seas tú.
Lanzar con fuerza el arroz a la cara de los novios
El momento «recién casado» es mágico y en muchas ocasiones va acompañado por la típica lluvia de arroz que lanzan los invitados. Hay personas que lanza el arroz en las bodas con saña, pero hay que tener cuidado que no llegan a los ojos de los novios porque puede ser muy molesto y puede hacer daño. Por otro lado si le entra en el ojo de la novia también le puede estropear el maquillaje.
Beber más de la cuenta
El slogan, bebe con moderación también se aplica en una boda. Solo tú sabes lo que puedes beber, la cantidad que puedes beber y cómo te pones cuando te pasas. Pero siempre hay que evitar pasarse. Quedarás muy mal si otros invitados o los novios tienen que estar pendientes de ti porque te has bebido unas copas de más. En una boda la noche no debe confundir.
Discutir
Discutir en publico o delante de personas ajena crea situaciones incomodos así que recuerda siempre que una boda no es el lugar más adecuado para empezar una discusión con tu pareja, hijos, o cualquier otro invitado o profesional. Intenta mantener la calma, por el bien de la fiesta, los novios. Seguro que el motivo por el que ibas a discutir no era para tanto.
Bailar como si estuvieras tú solo en la pista
La fiesta es siempre el gran momento esperado de cualquier invitado, siempre hay que acordarse que en una boda se está rodeado de personas conocidas y no tan conocidas. Puede que te gusta mucho bailar pero intenta siempre que no se te vaya de las manos. Recuerda que no estás solo y que le puedes soltar un manotazo a alguien por no controlar tus movimientos lo que debieras. Ahorra un poco de energía que la fiesta es larga.
Pisar el vestido o el velo a la novia
Este es un error garrafal. Los vestidos de novia no son baratos, y sus complementos tampoco. En más de una ocasión la novia ha perdido el velo antes de entrar a la iglesia por un invitado demasiado efusivo y y cómo podéis imaginar eso no le hace gracia a ninguna novia. Tened cuidado por donde pisas y no le estropees su gran día por un descuido.
Dar demasiado la nota
A veces la alegría, la euforia e incluso el alcohol nos hace sentir muy libres o si eres un familiar quizás incluso muy orgulloso pero siempre hay que recordar que no eres el protagonista del evento. Así que evita dar la nota, destacando demasiado incluso en la posta de baile, durante los speeches o en cualquier otro momento de la boda.
Acaparar a los novios
Los novios tienen muchas cosas en las que pensar durante la boda, y mucha gente a la que abrazar. Por mucho que los quieras, no acapares a los novios todo el rato y dales su espacio.
Llamar directamente a los novios para cualquier consulta
El día de la boda hay que evitar llamar y contactar con los novios. Si no sabes como llegar al evento, donde aparcar o cualquier otra duda intenta consultar primero con algun familiar u otro invitado que sabes que va asistir. Quizás los novios tienen contratado a un wedding planner que te puede ayudar. Pero es importante que los novios ese día estén libres de problemas y de estrés.
Paralizar una boda porque te apetece hacerte un selfie con los novios
Si no has organizado una boda quizás no lo sabes pero cada boda tiene su timeline y sus tiempos que lo van controlando el wedding planner y/o el catering. Para que todo funcione de forma fluido es importante no crear parones. A veces el tema de los selfies puede obstaculizar este timing. Por supuesto si lo hacéis en un moment de tranquilidad no hay problema pero por ejemplo los momentos antes y después de la ceremonia son delicados. Mejor durante el cocktail o la fiesta.
Sorprender a los novios con un vídeo de más de 10 minutos
En una boda pasan muchas cosas, que si brindis, regalos, sorpresas… Si os habéis puesto de acuerdo para hacer un vídeo tratad que sea breve y sobre todo entretenido. A veces los invitados se emocionan y preparan una sorpresa demasiado larga, esto sobre todo pasa con los videos. Sorpresas si, pero siempre que sean breves y no más de 10 minutos.
Poner nerviosos a los novios
Como os comentaba anteriormente, el día de la boda tiene que transcurrir «stressfree» y para ello es muy importante que como invitado/familiar no transmitas malos rollos, problemas o nerviosismo a los novios. Hay que darles soluciones, y facilitarles las cosas. Es su gran día.
Sacar continuamente fotos con los móviles
Todas las parejas confían en un fotógrafo profesional para las fotos de su día. En muchas ocasiones los invitados entorpecen ese trabajo tan bonito y el resultado es que salen invitados cruzando o con el móvil en los fotos profesionales y eso es una pena. Sobre todo cuando se trata de la ceremonia: la entrada de la novia, los momentos del si quiero y los anillos y la salida de la ceremonia.
Intenta evitar tomar fotos con el móvil o si lo quieres hacer de todas formas, procura estar lejos para que no interfieres con el trabajo del fotógrafo.
Ser descortés con las personas contratadas para trabajar en la boda
No hay nada peor que un invitado maleducado que trata mal a los camareros, al fotógrafo o maltrata el mobiliario, las instalaciones o la decoración. Es de muy mal gusto no tener respeto para las personas trabajando o incluso el mobiliario. Y recuerda, los centros de mesa no son para llevártelo a casa ni ningún otro tipo de elementos de la decoración.
Cuidado con el pintalabios y los besos
Como invitada siempre llevamos pintalabios y en muchos casos nos encanta el color rojo. El problema es que cuando damos besos, dejamos rastro en la cara de la otra persona. En el caso de la novia podemos arruinar el maquillaje que tanto le ha costado. Si llevas pintalabios recuerda dar besos mejor en el aire.
¿Llevar a la boda un uniforme militar o de policía?
Cuando el novio es militar o policía, probablemente lleve su traje de gala, y los invitados si tienen el permiso, también pueden hacer uso de él, si no, no. El problema está cuando un invitado lleva un uniforme de este tipo sin que el novio lo lleve. Esto es un error de protocolo que se puede evitar fácilmente.
Llevar chaqué o esmoquin
Si no eres el novio o el padrino este vestuario no es para ti. Ante la duda ve con traje chaqueta, nunca falla.
Quitar la chaqueta antes que el novio
Si has elegido llevar traje con chaqueta como invitado de boda tendrás que tener en cuenta que según el protocolo los invitados masculinos no deben de quitarse la chaqueta hasta que lo haga el novio. En la mayoría de los casos esto ocurre en el momento del banquete pero a veces el novio decide no quitárselo y en ese caso, como invitado tampoco deberías.
No comunicar tus intolerancia o alergias
Normalmente los catering preguntan a los novios si hay invitados con algún tipo de intolerancia o alergia para ponerles un plato alternativo. Si tienes algun tipo de intolerancia procura avisar a los novios para que se lo pueden comunicar al catering. No asumes que la pareja recuerda que tipo de intolerancia tienes porque se lo pueden olvidar o incluso equivocar.
Ivan Perez
abril 23, 2021Buen post, detalles de varios asuntos muy interesantes a tener en cuenta.
Hay momentos que son para disfrutarlos al máximo y una boda es uno de esos momentos más importantes..
lo que concierne a lo
Anjana
abril 27, 2021Enhorabuena por el post.
Debería de estar impreso en grande en cada boda.
Saludos.
Diario de una novia
abril 27, 2021Jajjaja muchas gracias. La verdad es que fue una buena colaboración con Mario Setién!! Me alegro que estás de acuerdo con estos errores!