Consejos de los Profesionales – Consejos para realizar un Reportaje de Bodas
Hola a tod@s,
Hoy os traigo una colaboración un poco distinto. Hasta ahora los consejos en este apartado siempre han sido de profesional a novi@s pero hoy sera distinto. Aunque estos consejos vayan dirigidos a los fotógrafos profesionales pienso que esta información para los novios también puede ser muy interesante:
Articulo escrito por:
Antonio Molina
Ante la posibilidad que me dio Diana de escribir un artículo en su carismático blog empecé a buscar información sobre consejos para realizar un buen book fotográfico de bodas. Necesitaba ordenar todos los conceptos que tenía en mi cabeza de una manera lógica para que tanto fotógrafos como aficionados y novias/novios futuribles estuvieran satisfechos y en esta búsqueda de información me encontré con este blog de la BBC que venía toda esta información aunque en inglés, así que me puse manos a la obras y con esto junto a mis propias ideas nació este post.
Me gustaría empezar con una reflexión y es que hay una premisa que todo fotógrafo tiene que tomarse un book de bodas como si se tratase una sesión de fotos con los más exigentes críticos y con los modelos perfectos, pues no podemos olvidar que en su día ellos lo son y nosotros debemos ser parte de ese grupo de personas que hagan que se lo crean. Si no somos capaz de eso el hecho de llevar una cámara no nos convierte en fotógrafos…
Dicho esto empecemos por algunos consejos a la hora de preparar el álbum fotográfico:
1. Planifica el gran día
La planificación y el orden es una máxima en cualquier trabajo que se precie, sin embargo en el ámbito fotográfico esto toma un cariz más importante. El día de la boda es un día caótico, de muchos nervios y emociones y donde nada tiene que dejarse al azar.
Para ello prepárate con antelación y siéntate con los novios para conocerlos. Conoce sus gustos así como sus manías, entiende que es lo que te piden y sobre todo qué puedes darle tú. Siempre habrá espacio a la improvisación pero ojo, no puedes dejar todo en mano de las musas porque son advenedizas y en un álbum de bodas todo tiene que salir perfecto. Yo soy de los que se refieren a la fotografía como el arte de captar los momentos, especialmente los imperceptibles por lo que en estas “reuniones” debes dejar claro que ese es tu don y ese es el trabajo que has hecho. En palabras llanas, vende tu trabajo.
Tómate tu tiempo para conocer en profundidad los enclaves, y con esto quiero decir iglesia (si la hay) salón, casa de los novios y lugares aptos para un book especial. Hay que saber los rincones mágicos que se esconden en cada lugar y dan la chispa a la foto. Ante esto prueba sobre prueba y tira mil fotos, encontrarás esos rincones o ellos te encontrarán a ti. Personalmente también recomiendo en la medida de lo posible reunirse con la wedding planner y debatir juntos aspectos para el día D. La wedding planner e interiorista sabrá mejor que nadie los entresijos clave en la boda y el porqué de ellos, conócelos y tus fotos recogerán todo el trabajo y significado que hay detrás.
Habiendo planificado estos dos puntos te será mucho más fácil saber el equipo que necesitas tanto material como si lo necesitases humano. Presta atención a los objetivos que llevas y ojo siempre es recomendable llevar dos cámaras, y es que dos cámaras ven más que una, y total solo será un bulto más…
2. El arte de ver sin ser visto
Parte de la magia de la fotografía y de la figura del fotógrafo está en esa capacidad suya para parecer invisible, para estar sin parecer que esté. Las mejores fotos son las que salen de forma natural, por eso un gran maestro decía que el mejor fotógrafo era aquel que veía sin ser visto y el que te mantenía cómodo a partir de su tensión.
Estas características toman mayor importancia en una boda, un momento tan especial en el que cualquier posado es una falta a la naturalidad del momento. Obviamente algún posado siempre es necesario y obligatorio, no olvidemos que es su día y no una sesión a naturalezas muertas pero prestar atención a la complicidad de las manos y al juego de miradas nunca está de más.
Mención aparte necesitan las temidas y tan demandadas fotos grupales. Preguntad a cualquier fotógrafo sobre ellas y su color facial cambiará instantáneamente. Pero vuelvo a incidir en lo antes relatado, un fotógrafo es un artista pero cuando cobra por sus servicios deja parte de su libertad y lo hace de buen gusto por lo que lo único que le queda es realizar una foto grupal teniendo en cuenta su criterio, y creedme cuando os digo que pueden salir fotos brillantes.
3. Educado como el novio en casa de los suegros
Siempre he sido partidario de la máxima de que un buen profesional se sustenta bajo una buena persona y una buena educación. No suelo creer en las estrellas arrogantes y pienso que esta arrogancia es la máscara de su debilidad. En el mundillo gráfico las hay en todos los rincones y a veces pierden la perspectiva de su trabajo por no decir su norte.
Una boda es un evento maravilloso, pero también es un evento donde las críticas están a la orden del día, pilla repaso desde el cura a la madre de la novia, obviamente pasando por el o la profesional que se encarga de las fotografías. Es parte de nuestro trabajo, asumámoslo y ante todo dientes, dientes y en especial paciencia. No la pierdas en ningún momento, especialmente en las fotos grupales, Recuerda que es una fiesta y que tú eres parte de ella.
4. Los accidentes no se pueden evitar, los nervios sí
El orden completo no existe, siempre hay algo que se escapa a nuestro control y es aquí donde se observa el tallaje del profesional. Accidentes siempre los habrá y las bodas no son la excepción. Lluvias, retrasos, mareos y así un largo etcétera de anécdotas en una boda. Es en estos momentos donde un profesional saca su casta e imaginación y saca fotos peculiares, diferentes y a la vez maravillosas. Un compañero me decía que egoístamente le encantaban los imprevistos en forma de gotas porque sacaban a relucir momentos espectaculares y él solo tenía que estar allí.
Como reitero no se trata de predecir los accidentes sino de no perder la cabeza y ser proactivo pero sobre todo creativo.
5. La originalidad es la razón de tu secreto
Al fin y al cabo todo nuestro trabajo se basa en esto, en la capacidad inventiva del profesional sino entraremos siempre en una espiral de copias diferentes a al vez que iguales. Hay que ser atrevido, dentro de unos márgenes claro está, y crear tu propio estilo. El mundo es muy grande y existen personas de todos los gustos y colores es por ello que hay que aplaudir iniciativas como “La exclusiva de la boda” un grupo de profesionales que se encargan de cubrir la boda como si se tratase una boda de revista, creando hasta sus propia revista y reportaje televisivo. Otra cosa no pero aseguran que la iniciativa siempre es divertida y provoca el buen ambiente entre los invitados. Otro ejemplo valido es este estudio centrado únicamente en las bodas Vintage mucho antes de que fuesen una temática habitual.
Es esto lo que a mi entender te hace mejor fotógrafo, perseguir tu idea y especializarte en ella es al final lo que te diferencia.
Antonio Molina Cubero
Blog: http://micamaraytuletra.wordpress.com/
Twitter: @molinacu